La Navidad es época de paz y unión. Sin embargo, para aquellas familias que perdieron a un ser querido, esta fecha puede causar ansiedad, angustia y sentimientos de añoranza, intensificando la tristeza por esa ausencia. Delsy Caballero, psicóloga del Hospital Emergencia Ate Vitarte (HEAV) del Ministerio de Salud (Minsa) sugiere no subestimar estas emociones.
La especialista señaló que si bien esta pandemia ha cambiado de manera radical nuestras costumbres y tradicional e incluyen ingredientes que no eran comunes en estas festividades, como el respeto de las medidas con el menor contacto físico posible, sí se puede añadir en las celebraciones de Navidad un ritual para honrar la memoria de quien ha partido. De esa manera, se hace menos doloroso y palpable el vacío de la persona que ya no está.
«Esa persona especial ya no está físicamente, pero se puede hacer que siga estando presente, encendiendo una vela en Nochebuena en su honor, colocando un altar o adorno especial que lo represente, o escuchando su música favorita», sugirió.
En ese sentido, aconsejó realizar actividades que traigan recuerdos consoladores y agradables del ser querido para conectarse con emociones positivas. Tener cierta planificación ayuda, así como cuidar el no exigirse mucho en un momento tan delicado.
La psicóloga resaltó que realizar estas actividades pueden provocar una montaña rusa de emociones, algunos pueden sentir enojo o culpa, mientras que otros sí puedan esbozar una sonrisa o simplemente no mostrar ningún tipo de sentimiento. Lo importante es respetar las emociones sin juzgar ya que el duelo es único para cada persona.
“Cada uno experimentará y demostrará sus emociones de distintas formas y eso no debe generar cólera, dolor u ofender a ningún miembro de la familia”, aconsejó la experta.
No obstante, si vemos que alguien pierde el control y experimenta una crisis de pánico, lo ideal es llevarlo a una zona segura donde pueda ser acompañado y validado emocionalmente.
“Esto se puede lograr con el silencio, actuando con gentileza, calma y solidaridad o usando conectores, como «estoy aquí para ti», «te acompaño en este sentimiento porque también lo estoy viviendo» o «qué te gustaría hacer para aliviar este dolor», que ayuden a expresar su malestar hasta que logre estabilizarse», indicó Caballero.
Resaltó que la distancia física que pueda existir no implica que no podamos pasar Navidad juntos. “Utilizar las herramientas tecnológicas fortalecerá nuestros lazos y mejor si las complementamos con actividades donde se recuerden anécdotas divertidas o pidamos perdón, soltando culpas y propiciando la reconciliación”, finalizó Caballero, quien recordó que la línea 113 opción 5 está disponible para aquellos que necesitan ayuda en Salud Mental.