La salud bucal de los niños desde una edad temprana es crucial para su desarrollo integral. El Ministerio de Salud (Minsa), a través de la Dirección de Salud Bucal de la Dirección General de Intervenciones Estratégicas en Salud Pública (Dgiesp), destaca la importancia de cuidado oral desde la gestación y durante los primeros años de vida.
Una de las enfermedades bucales más prevalentes en niños es la caries dental, esta puede generar dolor e infección, afectando la capacidad de alimentarse y dormir adecuadamente, así como el desempeño escolar. Además, la pérdida prematura de dientes puede ocasionar problemas de oclusión o alineamiento de los dientes para una buena mordida y estética. El director ejecutivo de la Dirección de Salud Bucal, Dr. Marlon Tenorio, enfatizó en la trascendencia del cuidado bucal como pilar fundamental. «La salud bucal es crucial para el crecimiento y desarrollo de los niños. Un adecuado cuidado no solo garantiza la integridad de los dientes, sino que también influye en su aprendizaje, habla, alimentación, autoestima y socialización. Es por ello que es importante fomentarla desde temprana edad”, dijo. RECOMENDACIONES PARA UN ADECUADO CUIDADO BUCALLa lactancia materna exclusiva hasta los seis meses y la introducción gradual de alimentos sólidos acompañados de una correcta higiene son fundamentales para prevenir la caries dental y promover un desarrollo bucal saludable, así como el de los músculos para una buena masticación. El Dr. Tenorio agrega que «el cepillado con pasta dental fluorada de 1000 a 1500 ppm de flúor debe iniciarse desde la erupción del primer diente y el uso del hilo dental una vez exista contacto entre dientes. Además, se debe retrasar al máximo el consumo de azúcares hasta los dos años y posterior a ello limitar su consumo. Finalmente, para fomentar hábitos de higiene bucal desde la infancia se recomienda realizar visitas periódicas al odontólogo desde antes del primer año de vida, con el apoyo constante por parte de los padres. El Minsa insta a los padres y cuidadores a asumir un papel activo en el cuidado bucal de los niños, promoviendo hábitos saludables y realizando visitas regulares al odontólogo para asegurar una boca sana y vida saludable.